Es un paraje natural situado a la salida de la población, en la carretera de Las Mesas, justo en el punto donde se cruza con el río Záncara. En él podemos disfrutar de un amplio espacio para el recreo, no en vano cuenta con instalaciones deportivas, sanitarias, zonas verdes, arboledas, zonas de acampada y barbacoas.
Todo ello, además de los viñedos y las casas de campo típicas que lo rodean, convierten a este espacio en un lugar idóneo para disfrutar de una jornada de contacto con la naturaleza.
En este mismo paraje, que está atravesado por la Cañada Real de Cuenca y por el Río Záncara, a unos cinco kilómetros del casco urbano, se encuentra la Ermita de San Isidro, donde se celebra la tradicional romería en honor al patrón de los agricultores.